El placer de la comida comienza por los ojos

Las ciudades fronterizas tienen la particularidad de combinar dos culturas y tradiciones que se influencian recíprocamente, generando así nuevas formas de expresiones socio-culturales. Para el joven chef Tetsuya Nishimura esto se expresa también en el arte culinario “Pedro Juan Caballero y Ponta Porá son una sola ciudad, no hay una división entre Brasil y Paraguay. Entonces, creo que tenemos una gastronomía única, que es una mezcla de un poco de cultura paraguaya y un poco de cultura brasilera”.

A los 21 años de edad tuvo la oportunidad de ir a trabajar al Japón, experiencia que valora como una de las más importantes de su vida, donde pudo conocer la cultura y los valores japoneses. A partir de eso su identidad Nikkei es un motivo de orgullo y de diferenciación “por ejemplo acá en la frontera los nikkei tenemos una imagen de ser personas honestas, educadas, trabajadoras, y eso me di cuenta al ver a los japoneses, que son honestos, trabajadores, trabajan doce, catorce horas al día. Y esas cosas tenemos en común”.

Para Tetsuya, el arte culinario posee un valor estético que comparte con su madre y a través de ella con la comida japonesa. En ese sentido, también es un medio para el conocimiento y descubrimiento de la diversidad cultural. Desde muy pequeño ayudó a su mamá en la cocina hasta que en el año 2016 inició su formación y carrera como Chef profesional. Sobre este vínculo Tetsuya sostiene que “es mi mamá, siempre le veo a ella cocinando, los platos que ella prepara son muy lindos, y desde chiquito siempre admiré eso de mi mamá. Hace comidas bien delicadas y lindas, prepara más comida japonesa, ella es mi mayor influencia”.

A poco tiempo de iniciar su carrera como chef profesional fue seleccionado para participar en el certamen “El próximo gran Chef” gracias a su profesor que pudo ver en él un gran potencial para la cocina, resultando ganador en la categoría salado.

La receta secreta que le permite a Tetsuya alcanzar sus metas y objetivos es el gusto que tiene por lo que hace y el respeto al trabajo en equipo “te tiene que gustar lo que haces. Porque yo ya trabajé en varios sectores, pero ahora que empecé a trabajar en cocina descubrí que esto es lo que me gusta, y ya no tengo más ese sentimiento de “que tengo que trabajar”, “que mañana es lunes”. Yo vengo con ganas, cada día es un desafío para mí, entonces, te tiene que gustar lo que haces”.

Su condimento principal, el quinto elemento, el amor. “La gastronomía es un sentimiento, siempre digo tengo que ponerle amor, hacer con cariño y eso nosotros conseguimos pasarles a los clientes en los platos. De repente hay personas que hacen con mal gusto y eso se pasa al plato. Y a mí me gusta que los clientes coman felices y te digan que estuvo rico. Para mí es una forma de expresar sentimientos”.

Con este amor hacia lo que hace y con la claridad de que la gastronomía para él es más que un trabajo, es compartir sentimientos, alienta a la juventud Nikkei a seguir sus sueños y animarse a crear, producir y emprender porque como dice él “todo el mundo tiene que trabajar, siempre tenemos que trabajar, pero en algo que nos gusta”.

te tiene que gustar lo que haces. Porque yo ya trabajé en varios sectores, pero ahora que empecé a trabajar en cocina descubrí que esto es lo que me gusta, y ya no tengo más ese sentimiento de “que tengo que trabajar”, “que mañana es lunes”. Yo vengo con ganas, cada día es un desafío para mí, entonces, te tiene que gustar lo que haces”.